IUSY reiterates its concern about the current situation in Chile

The International Union of Socialist Youth (IUSY) expresses its concern about the latest developments that have taken place in Chile. Since the beginning of this week, President Sebastián Piñera has decreed a state of constitutional exception, giving control of Santiago to the military.
The growing wave of violence by the State security forces towards citizenship, the violation of human rights, the search of homes and detention of civilians for no reason, and the 18 deaths and infinite number of people injured by hands of state agents.
We welcome the decision of Michelle Bachelet, the United Nations High Commissioner, to send a verification mission to examine allegations of human rights violations in Chile.
In addition, we call on IUSY member organizations to press their countries not to attend APEC or COP25, both events to be held in Chile soon, while maintaining the state of constitutional exception in this country.
We call again to open the dialogue between the different actors so that politics can provide solutions to society, and face a deep transversal discontent, which especially concerns young people. 
These unpublished demonstrations cannot be confronted only with police violence.
And as the greatest socialist leader who has given the Chilean land, Allende, said, “They have the strength, but social processes do not stop with either crime or force. The story is ours and the people make it.
 
 
ESP 
 
IUSY reitera su preocupación por la  situación actual de Chile.
La Unión Internacional de Juventudes Socialistas (IUSY por sus siglas en inglés), manifiesta su preocupación por los últimos acontecimientos que se han desarrollado en Chile. Desde inicios de esta semana el Presidente Sebastián Piñera ha decretado estado de excepción constitucional, cediendo el control de Santiago a los militares.
Es alarmante la creciente ola de violencia por parte de las fuerzas de seguridad del Estado hacia la ciudadanía, la violación a los derechos humanos, el allanamiento de domicilios y detención de civiles sin motivo alguno, y las 18 muertes e infinita cantidad de personas heridas a manos de agentes del estado.
Celebramos la decisión de Michelle Bachelet, alta comisionada de Naciones Unidas, de enviar una misión de verificación para examinar denuncias de violación de derechos humanos en Chile.
Sumado a ello hacemos un llamado a las organizaciones miembros de IUSY a presionar en sus países para no asistir a APEC ni a COP25, ambos eventos a desarrollarse en Chile próximamente, mientras tanto se mantenga el estado de excepción constitucional en este país.
Volvemos a hacer el llamado a abrir el dialogo entre los distintos actores para que la política pueda otorgar soluciones a la sociedad, y enfrentar un descontento transversal profundo, que especialmente toca a los jóvenes. Estas inéditas manifestaciones no pueden ser enfrentadas sólo con violencia policial.
Y como dijo el más grande dirigente socialista que ha dado la tierra chilena, Allende, “Tienen la fuerza, pero no se detienen los procesos sociales ni con el crimen ni con la fuerza. La historia es nuestra y la hacen los pueblos”.